martes, 6 de diciembre de 2016

Reseña critica de
recomendación de Cuento: Los Puercos de Nicolás Mangana.


Comento o Resumen.
Jorge Ibargüengoitia
Jorge Ibargüengoitia fue ante todo un literato con alto sentido crítico. El humor de sus cuentos, sus novelas, sus obras teatrales y sus artículos periodísticos es de un sarcasmo fino y salvaje
La manera como utilizaba su ágil prosa para diseccionar y destazar, para ridiculizar y poner en evidencia a sus personajes —muchos de ellos personajes del poder político y económico, ya fuese a nivel nacional o en el microcosmos de la provincia mexicana— era su fórmula para dinamitar la historia y la realidad oficiales, para hacer trizas el mito de las instituciones y del desarrollo estabilizador, en una época en la cual el PRI era el partido hegemónico en México.

RESUMEN De Los Puercos De Nicolás Mangana.
Nicolás Mangana era un campesino pobre pero ahorrativo. Su mayor ilusión era juntar dinero para comprar puercos y dedicarse a engordarlos.
“Los puercos están comiendo y el dueño nomás los mira. Cuando ve que ya no van a engordar, los vende por kilo”. Cada vez se le antojaba una copa de mezcal, sacaba de la bolsa dos pesos, que era lo que costaba el mezcal y los echaba por la rendija del puerco de barro que le servía de alcancía, y hacía lo mismo cuando su familia le pedía algún gusto, no se los compraba y echaba el dinero a la alcancía.
  Cuando Nicolás vio que ya no cabía un quinto más, rompió la alcancía con todo el dinero y lo fue a cambiar por un billete de mil pesos.
Regresó a la casa junto a su familia y les dijo “voy a ir a la feria de San Antonio, voy a comprar unos puerquitos, los vamos a poner en el corral, los vamos a engordar, los vamos a vender y vamos a comprar más puerquitos, vamos a seguir haciéndolo hasta que seamos de veras ricos”.

Llegando el día de San Antonio, Nicolás se levantó muy tempranito, se vistió guardo el billete de mil pesos entre las correas del huarache, se despidió de la familia y se puso en marcha.
Eran muchos los que iban camino a la feria. Entre todo aquel gentío se distinguía un hombre que iba montado en un caballo blanco. Nicolás lo miro lleno de envidia y pensó “Ese hombre es un ranchero huarachudo como yo, montado en ese caballo parece un rey, así debería ir yo montado”.

Decidió que nomás que fuera rico exactamente igual. Apretó al paso hasta emparejarse con el caballo y empezó a platicar con el que lo montaba.
 Evaluación.
Esta historia nos conmovió mucho pues al ver el sacrificio, que Nicolás hizo y obligo a su familia para lograr su sueño de salir de la pobreza en que vivían, pero desgraciadamente cuando por fin después de mucho esfuerzo y sacrificio logro juntar mil pesos, la envidia lo carcomió por dentro y sacrifico sus sueños por un caballo.
A sus hijos los privó de juguetes y helados. A su esposa de rebosos, huaraches y cazuelas. Sacrificó los pequeños gustos de la vida por una supuesta mejoría, que nunca llegó pues Nicolás no le importó eso y mejor compro un gusto innecesario.
Sentimos que la acción de Nicolás fue muy egoísta, sacrifico a su familia.
Este cuento ocupa una historia en donde el contexto es un México pobre donde Nicolás tiene un deseo que la mayoría de mexicanos tenemos, llegar a ser ricos, el autor juega con los sentimientos de los lectores.










 Información de los reseñadores.
Christian Momox Momox, Francisco Fabián Rayón López, Carlos David Cortés Ramírez, Marco Antonio Tentle Mancilla, Juan Pablo Castelán Linares
3° A


 Referencias Bibliográfica
Ibargüengoitia, J. (1998). Los puercos de Nicolás Mangana. México, D.F.: Campaña Editorial Ultra.

3 comentarios:

  1. Es de muy agradable que pueda leer reseñas críticas muy bien elaboradas y es que el cuento de este gran autor es uno de mis favoritos. Sin duda un exelente trabajo!

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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